19 Abr 2024

292. POESÍA COSTARRICENSE. MELVYN AGUILAR

-05 Sep 2021

 

BACK HOME

 

A veces

hay caballos volando

por el diapasón imaginario de mi cabeza

furiosos y libres caballos. 

Pero otras veces

me pierdo

de vuelta a casa

de vuelta a casa,

en el bosque

me pierdo.   

 

 

BLUE NOTE

A Jorge Arturo

 

…Berangere, es un nombre largo,

demasiado largo para una niñita…

 

Las pequeñas

                graves voces del sax

revientan la noche,

el orín en el callejón y los vapores,

escalan el dorado metal

de un viejo selmer.

 

La ciudad le duele al intérprete,

importa poco si es

Brooklyn o París

de cualquier modo el Sena

arrastra en sus jadeante cause

el dolor de un mundo que intenta reinventarse

una y otra vez.

Hay una vieja canción olvidada,

que habla del otoño

una vieja tonada

perdida entre los pasadores coronados de nácar

una vieja canción rebotando, ausente

sobre la muscular memoria de un encorvado  Dale Turner

una vieja canción para soñadores de manos vacías

una vieja canción de terciopelo suave

     y azul

como la mirada de Berangere.

 

 

HOW TO KILL A BIRD

 

La noche es como pájaros,

asustadas semifusas en el azul de las tabernas

pentagramas de hombre triste.

­–NOSTALGIA–

tozudamente almacenada en la

–tenebrosa /sombra/ prima /queda–

 

Chillidos

que arremeten

sobre la memoria 

con sus furiosos aguijones

de marfiles.

 

Un once, 

vaho pitagórico,

que no se cruza,

porque si lo haces,

hiere.

 

Encrucijadas análogas

de los wester de la infancia,

pequeños remolinos de hierba,

violentando

los minúsculos pactos

hechos desde el amor. 

 

 

EL PERRO QUE AÚLLA 

 

Cuando pase la media noche

empezaré a búscate

–mi niña negra–

 

En el verde profundo empezaré a buscarte

a buscarte mientras una brisa,

aún fría y húmeda  

golpea las blancas fibras en los arbustos

y la luna

con lentitud atraca sobre las aguas del delta.

 

Cuando pase la media noche

conversaré con el río

sobre mi niña enterrada-viva

por el azul de su corriente. 

 

Cuando pase la media noche

iré a la encrucijada

y hablaré con los muertos

cuando pase la media noche.

 

 

HEBRAS

A BB King

 

Las hojas caen

en el jardín, Mary

y es temprano aún par ir a jugar con la yerba

pero nena,

las hojas caen,

viajan por la demacrada arquitectura

de esta ciudad.

 

Mary

regálame un parpadeo

mientras tomo café.

 

Ayer vino el cartero,

dejó su chaqueta roja en la baranda,

trajo noticias del viejo mundo,

donde fuimos felices bailando entre los sauces llorones de antaño.

 

Mary, prende un porro en la estufa

 –aún humante– 

Y escucha el susurro del viento,

escucha al viejo heraldo, hablar

de nuestra casa en la montaña

y de las hojas  

que nunca dejan de caer sobre nuestro cobertizo.

 

Vamos al jardín Mary,

Vamos al jardín

y sintamos las hojas sobre nuestra piel magra y divina.

 

Vamos al jardín a revolcarnos en el verde

Y soñemos, una vez más con nuestros hijos,

 

                –se ven tan pequeños e indefensos en las fotografías–    

 

Esta ciudad está llena de ojos muertos Mary.

Tras sus puertas de metal y de granito

Ya nadie sonríe.

Pero las hojas caen nena

Y la mañana empieza regalándonos un blues

azul y vegetal.

Como tus ojos Mary

Como tus ojos de yerba seca. 

 

 

BAJO LA LLUVIA FRÍA

 

The night my father died in the cold cold rain (in the cold cold rain)

La noche que murió mi padre bajo la lluvia fría (bajo la lluvia fría)

T.W.

 

 

Enciende una luz muy blanca

sobre el negro escenario de tus días

y pon con urgencia algo de polvo en tu nariz, 

–pon un gato muerto en las vías del tren–

e imagina por un momento

el irrisorio bombín de Tom Waits.

 

Luego,

 –respira sumiso­–  lo que el aire de la noche te cuente.  

 

El día que mi padre murió,

Recodé a Jack Kerouac.

Llovía con timidez,

y caían del cielo

finas y frías 

hebras de gato negro.

 

Desde entonces

tan solo sigo el camino,

tan solo lo sigo,  

sin importar

en qué lado de la carretera

pongo mis pies.

 

 

VEN A CHICAGO

 

Vamos a Chicago

vamos a Chicago

donde los bares

del viejo distrito Sur

son los ojos de la noche,

vamos ahora

                    que los tanques rojos

 ya no ruedan sobre Checoslovaquia

y los muchachos ya no queman sus boletas

camino a Canadá-fronter.

 

Vamos, vamos, vamos,

recordemos juntos 

como se ahogaban las tristes melodía 

entre las Thompson y el humo de las tabernas.

 

Acompáñame a la ruda-eléctrica ciudad

y susúrrame algo sobre de Etta James

                                                             o Magic Slim  

                                                                             y su guitarra,

háblame duro de la 888 y prohibición,

del oprobió y el dolor de aquellos años.

 

Vamos a chicago

Vamos a chicago

 vamos.

 

Textos del poemario inédito Blue

 

 

Melvyn Aguilar (Costa Rica). Cursó estudios de sociología en la Universidad de Costa Rica. Es cofundador del Colectivo Octubre Alfil 4, del Colectivo Voz Urbana y del Taller Anti-TallerAnti. Dirigió la revista de literatura costarricense La Mandrágula. Ha publicado: Territorios habituales (2006), Xarxa D’ Aranya (2012) y MayDay (2015). Es el editor de la revista de poesía “El pez Soluble”. Publica desde el 2010 en e l Blog “La ratonera”. Miembro fundador de la Editorial FALENA en El Salvador y cofundador del espacio para la conceptualización en el arte I: TALLER. Tiene inéditos los poemarios: Modus Operandi (poesía) 2015, Malversación del Paraíso (poesía) 2011, Detrás del conejo del espejo (Poesía), 1996, Kaldunia (Poesía), 1993.

 



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