19 Abr 2024

255. POESÍA COLOMBIANA. ALEJANDRO CORTÉS GONZÁLEZ

-05 Jul 2021

 

INTRO

 

A escena una luz

y sólo una luz

Su delgadez cabalga un crujido de tambores y sintetizadores

Más crujidos

Destellos

Apagones

Entre los tambores se mezcla la obertura de una obra clásica

Serán las Valquirias de Wagner

o el Réquiem de Mozart

o el avance de El Acorazado Potemkin bajo la batuta de Meisel

 

Estamos vivos

Ya no nos vemos las caras

pero estamos más vivos que cuando nos podíamos ver

En este momento es la oscuridad quien nos muestra su cara más intensa

El galope crece

Ya no distinguimos tambores de teclados

ni Valquirias de Réquiems

ni destellos de apagones

 

La gente unifica un murmullo monótono antes del asombro

Nosotros:

la gente

Algo viene

Algo viene

Debe ser la nave púrpura que prometieron esta noche

Se siente en el murmullo colectivo y en el parpadeo de los reflectores

La nave trae cinco sombras eléctricas que ya nos miran desde el escenario

 

No los vemos ni los oímos

pero ahí están

Nos oyen

Saben que esperamos aquí por ellos

 

La ansiedad se lleva el aire de nuestros gritos

Están aquí

Ya no sabemos si los tambores son palpitaciones

o si los destellos son parpadeos de un ojo alucinado

No sabemos

 

Pero

 

De repente

 

Un golpe

                                         

y estamos a oscuras de nuevo

 

Un segundo de silencio

y todo suena y se ilumina

 

Por fin

Los vemos

los oímos

y no lo creemos

Por fin estalla la espera en un éxtasis de gritos

Aquí comienza la primera canción:

 

 

THE FINAL COUNTDOWN

 

Oscila el espacio

algo viene o algo se va

Lo cierto es que son las tres y cuarenta

en un viejo reloj sobre las montañas de Suecia

No hay un conteo

sólo oscilaciones

El tiempo no se cuenta

pero sí se siente cuando nos arquea el cuerpo

 

Hay que salir de esta habitación con reloj

de este sobrevuelo de montañas

de este ruido acuoso de planeta

Siempre alegra un conteo

para marcar las últimas horas que haremos lo que ya estamos hartos de hacer

Oscila el trémulo del piano

y sigue vibrando

hasta su curva más alta

 

Luego

estalla un escenario

La elevación de la canción nos levanta los pies en saltos continuos

Estamos arriba

Joey Tempest canta las “o” de un coro espacial de bienvenida

Dejar la tierra da tanta tristeza como salir de la vida de una mujer azul

Hermosamente azul

Hemos vivido juntos tanto tiempo

que nunca nos imaginamos dar un paso fuera del otro

 

¿Eso es posible?

¿Es acaso el tiempo quien cuenta nuestros últimos pasos?

El espacio es una reproducción del vacío

De vez en cuando una estrella

un guijarro cósmico

un agujero negro

Espacio es la distancia insalvable entre dos manos hartas de estar unidas

 

Podemos explorar nuevos mundos

Podemos contar átomos fuera de la cápsula del comandante Tom

David Bowie lo hizo

Los átomos fueron un conteo de cabecitas negras sobre un pentagrama

que Joakim Larsson leyó y leyó

 

No hay aire fuera de nuestro lugar seguro

La gravedad se reduce al cordón umbilical

que ata a un astronauta a su nave nodriza

Si nada gravita nada flota

Si nada pesa nada es liviano

 

Un coro que advierte lo que está a punto de terminar

no es sólo un coro

es una letanía del espacio

donde un sintetizador pregunta y un humano responde

Y todos saltamos porque sentimos que nos vamos

Porque alejar los pies dos centímetros de la tierra

es acercar la frente dos centímetros a Marte

¿Será el Marte de Mick Mars?

¿Será la luna de Moonspell?

¿Será el Mercurio de Queen?

Europe puso los números finales para el despegue

 

Y allí estamos

solos

flotando entre nebulosas blancas y agujeros negros

sin motivación para movernos a ningún lado

 

Hace frío

Que nos muevan

Estamos solos

El invierno dura toda nuestra vida

Si al menos un disparo en la sien nos calentara las venas

 

Flotamos helados y solos sin la obligación de movernos

pero nos estamos congelando

En serio

hace frío

Las sombras se petrifican en el hielo

Un sintetizador al final del conteo

nos comprueba que realmente

nunca salimos de Suecia.

 

 

ANGIE

 

With no lovin’ in our souls

And no money in our coats

You can’t say we’re satisfied

Angie, THE ROLLING STONES

 

Angie

era la canción que no pudimos tocar en el colegio

y el nombre de la niña que nunca nos dio un beso

 

Por ella queríamos que nos saliera barba

Por ella intentamos tocar la guitarra

Por ella pintamos grafitis en el barrio

hasta darnos cuenta de que la vida es una lata gastada

que pierde el color de sus gritos cuando todavía tiene gas

 

Angie

Siempre pisamos la tierra bajo las mismas nubes

El amor en los bolsillos no nos llevó a ningún lado

Pateamos piedras de distintas avenidas

sólo para gastarnos los zapatos

 

Angie

No estoy satisfecho

La adolescencia se fue en los cuatro minutos treinta y nueve segundos

que duramos bailando tu canción

Luego fuimos un rodar de latas adultas

De piedras en el camino de alguien

que el azar fue pateando de tiempo en tiempo

hasta hacernos coincidir hoy

en este pequeño almacén

 

Angie

Estoy a punto de entrar

 

Voy a fingir que compro unos zapatos

tú vas a fingir que me los vendes

y ambos haremos como que no nos conocemos

Para tanto extravío

no bastan unos zapatos nuevos

 

Angie

Sonriamos

Poco importa si estamos satisfechos.

 

 

GYPSY ROAD

 

Llevo puesta una camiseta de Cinderella

Pido una cerveza y una canción

Suena Gypsy Road

El camino es el hogar de un gitano

Por más que avance la carreta

la noche va del vacío a la nada

 

Luego suena Boney M.

Sus acetatos estaban en la casa de mi padre

en aquella época donde yo era One for rock and roll

y él padecía la ira

más que la diabetes

 

Suena Coming Home

Las canciones de Cinderella hablan de volver a casa

Supongo que Cenicienta siempre debe regresar

antes de que un sol de soldadura

sobre las latas de una moto

indique el sellamiento de la noche

 

¡Ah!

Le subieron el volumen a la canción de Boney M.

¿Cómo lidiará mi padre la soledad?

¿Con quién afrontará la amargura de su sangre dulce?

¿Conservará el espejo en el que se acomodaba su boina estilo AC / DC

y se afeitaba cada tercer día?

 

No somos muy distintos

Afeitarse

es ver la cara de mi padre

con una cuchilla en el cuello

 

Suena de nuevo Gypsy Road

Padre

nuestro hogar fue un cruce de caminos

Apagan la luz del bar

Para escribir me basta el resplandor de los neones

Ojalá que a mi padre

le baste el resplandor accidentado

del recuerdo que soy.

 

 

UN HOMBRE RUDO CAMINA COMO SI ESTUVIERA

EN UN VIDEOCLIP DE GUNS N´ ROSES

 

Hay hombres que pasean con pitbulls y rottweilers para verse rudos

Pero un hombre rudo

realmente rudo

enciende un cigarrillo mientras arrastra por la cola a un cocodrilo africano

 

Un hombre rudo camina como si estuviera en un videoclip de Guns N´ Roses

y al final se da el lujo de amedrentar a Axl Rose

 

Un hombre rudo tiene un nido de zarigüeyas en la rueda del hámster

y se afeita la barba con una barba de abejas

 

La casa de un hombre rudo tiene un puma sobre el tejado

un tiburón en la bañera

y pirañas en el agua de los baños

 

El garaje de un hombre rudo tiene una jaula de águilas calvas

que se alimentan de gatos

que se alimentan de canarios

que se alimentan de las tarántulas

que en cada esquina tejen una red

 

Un hombre rudo no es un tigre en la cama

Tiene un tigre en la cama al cual golpea antes de hacerle el amor a una mujer

y termina con un grito de diez segundos al estilo de You Could Be Mine

 

Un hombre rudo se abriga con bufandas de piel de boa

sin matar la boa

Y en venganza adánica la obliga a tragar manzanas

 

Cuando un hombre rudo saca la leche de la nevera

es porque en la nevera tiene a una búfala pariendo

 

Un hombre rudo camina descalzo sobre su alfombra de piel de oso

aunque el oso todavía esté usando esa piel

 

Un hombre rudo mira al miedo a los ojos

y hace que el miedo tiemble de miedo

 

Un hombre rudo tiene…

La casa de un hombre rudo tiene…

El garaje de un hombre rudo tiene…

Hollywood nos ha enseñado que la rudeza de un hombre

está en tener

Y no sé qué más decir de un hombre rudo

No conozco personalmente a ninguno

y creo que cualquier persona se alejaría de él

 

Excepto Chuck Norris

Porque Chuck Norris tiene un afiche de Schwarzenegger en su habitación

y ese sí que fue un hombre rudo

dentro y fuera de Hollywood

 

Él fue el gobernador más rudo que ha entrado a un salón de belleza en Texas

para que una mexicana que trabajaba quince horas diarias

sostenía a su familia y enviaba dinero a Guadalajara

una mexicana

realmente ruda

le arreglara el pelo

y le hiciera el manicure.

 

 

ESTAMPA DOMINICAL CON LA IMAGEN DE KURT COBAIN

 

Lunes y martes y miércoles y jueves y viernes y sábado

viviendo con la sensación de domingo a la tarde

Publicidad de la revista Rolling Stone, Argentina, 2003,

Edición Homenaje a Kurt Cobain

 

Si los ochenta con sus luces glam y ritos de alto voltaje

fueron la fiesta del sábado en la noche

los noventa con su bostezo grunge y lágrimas en unplugged

fueron la resaca del domingo

o mejor

el domingo del siglo

 

Un domingo de pétalos de lana

donde la luz duerme en las paredes

Un domingo que saluda como la entrada de Aberdeen

 

Welcome to Aberdeen

Come as you are


Kurt Cobain nació un lunes

murió un martes

y nos dejó el aire de todos los domingos

Aberdeen saluda mi casa

Yo obedezco

Voy como estoy

Con este letargo de las horas

Con esta ira adormecida

El tedio en dos acordes de cerveza explota el día en pequeños agujeros

 

¡Qué más da!

Es domingo

Hay un señor en el cielo a la diestra de Kurt Cobain

Kurt de nuevo es un niño rubio

como los que aparecen en las carátulas de los villancicos

Tiene un suéter azul

la boca de pato

y sonríe

aunque su cabeza de niño ya tenga colgado el blanco de la bala

Igual sonríe

como para ponerlo en estampitas y venderlas el domingo

en las iglesias de Aberdeen o del Veinte de Julio

 

Con cuánta distorsión cantaríamos alabanzas en su nombre

En qué esquina del vacío levantaríamos su santuario

A ver si nos cura esta resaca del siglo

A ver si nos fabrica un lunes y de paso una sonrisa

A ver si nos revela por los méritos de su divina infancia

de dónde sacan la alegría

un domingo

los ángeles suicidas.

 

 

CIRCULAR INFORMATIVA EN LA SALA DE TATUAJES

 

Al comenzar su tatuaje, es conveniente que retenga la sensación de la aguja pasando por las zonas más sensibles, para así elevar el umbral de dolor. De este modo, cuando la aguja toque una zona de mediana sensibilidad, usted podrá decir “Es suave; puedo soportar más”. Y cuando toque una zona de mayor sensibilidad, usted podrá decir “No hay problema; ya he experimentado este dolor”. Y cuando pase por una zona ultrasensible por la que nunca antes había pasado, usted podrá decir “Bueno, esto va a elevar mi umbral de dolor. Lo que venga después será poco en comparación a esto”.

 

No le vamos a mentir: esto va a doler. Pero si usted tiene en cuenta las anteriores recomendaciones y eleva su umbral de dolor, su experiencia será más satisfactoria. Recuerde que un tatuaje es una cicatriz con la forma de algo que apreciamos. Igual que el amor. Y de eso se trata… de no salir ilesos, de quedar marcados en un rito memorable y sin anestesia. De no contener el amor para evitar dar más amor, y todo su saldo de agujas y algodones sangrados que nos comprueban que una vida pasó por nuestro cuerpo, bien sea en la habitación de un hotel o en la sala de un tatuador. Al fin y al cabo, tanto el amor como los tatuajes, son asuntos de piel.

  

 

Alejandro Cortés González nació en Bogotá, Colombia. Autor de los libros Notas de inframundo (Novela sobre el rock y metal en Colombia, 2010), Pero la sangre sigue fría (Poesía, 2012), Sustancias que nos sobreviven (Poesía, 2015), Del relámpago nacerán luciérnagas (Novela, 2018), Instantáneas dominicales (Poesía, 2019), Almanaque Bristol 1987 (Poesía, 2019) y El álbum púrpura (Poesía, 2021). Ganador del Premio Nacional de Literatura de la Universidad Central en las categorías Novela (2009) y Cuento (2011) con “Él pinta monstruos de mar”. Ganador de la Beca de Circulación Internacional para Creadores del Ministerio de Cultura (2013), con la que participó en VII Festival Internacional de Poesía en París. Ganador del VI Concurso Nacional de Poesía UIS (2014). Ganador de la Beca para publicación de Obra Inédita del Ministerio de Cultura (2019). Ha sido invitado a encuentros literarios en Suramérica, México, Francia y Canadá. Fue vocalista y tecladista original de la agrupación Eternal Lament, vocalista de Los Malditos ConVersos y, actualmente, músico de Grave Compañía —ensamble de poesía y rock experimental—. Es director de talleres de creación literaria, director de la Fundación Trilce, coordinador del espacio cultural Trilce en La Galería y del Club de Poesía de la Biblioteca Luis Ángel Arango, en Bogotá.

 

 



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